En teoría a todo el mundo le gusta viajar, sin embargo hay unos que lo adaptan más como un particular modo de vida que otros. Gracias a estas 6 características que definen al buen viajero vas a descubrir si recorrer el mundo a lo largo y ancho es tan sólo un pasatiempo o una verdadera prioridad para ti. ¿Estás preparado?
#1 Gustos que delatan
Seguramente no te pierdes ningún número de cierta revista de turismo y devoras sus páginas mientras deseas poder descubrir lo que estas relatan. También eres seguidor de varios blogs de viajes, cuentas especializadas en redes sociales o documentales televisivos. No es simple afición, es una inquietud constante.
#2 Viajas solo
Si alguna vez has llegado a viajar solo por mero placer, sin necesidad de entremezclar estudios o negocios de por medio, queda bastante claro que eres un adicto a los viajes, que no no se trata de una rigurosa afición a cumplir cada año durante las vacaciones con tu pareja o amigos, sino que disfrutas de otros países en soledad por puros motivos existenciales.
#3 Te organizas bien
Una maleta empacada en 20 minutos con todo lo indispensable o la seguridad de no pagar sobrepeso, una gestión eficaz de visados, vacunas, alojamiento y billetes baratos para el precio que acostumbra el destino son signos de que no necesitas hacer un mundo cuando te dispones a viajar. Y, posiblemente, dejes escapar una risa inocente cuando compruebas que tu mejor amiga tarda dos días en empacar la maleta.
#4 Constante ahorro
Posiblemente tengas una alcancía en el que introduces monedas todos los días, te privas de algunas salidas al cine o un restaurante y, cada cierto tiempo, revientas la hucha para gastarlo en lo que más te gusta… viajar. Esto deja bien claro cuáles son tus prioridades por encima de otros muchos pasatiempos o aficiones, es una necesidad a colmar en cuanto tienes ocasión.
#5 Multilingüístico
Hablar dos o más idiomas de forma fluida delatan al viajero empedernido. Si bien los estudios condicionan estos conocimientos, el viajar refresca el registro lingüístico, y si además eres capaz de hablar ciertas palabras de varios idiomas diferentes, esto índica que hay inquietud, experiencias y entornos multiculturales.
#6 Low cost travel
«Gastamos mucho dinero durante nuestro viaje de una semana a París«, nos dice un amigo. «Unos 2 mil euros«. Tras esta declaración, ese adicto que escucha la conversación se pregunta cómo una persona puede gastar tanto en un lugar existiendo alojamientos económicos, aprovechando ofertas de vuelos y barco, coche compartido, trucos para obtener los mejores bocados en restaurantes decentes, utilización de Internet en su smartphone o demás gastos innecesarios.
Estas 6 señales de todo adicto a los viajes son perfectamente reconocibles entre los propios viajeros aún cuando el resto del mundo sigue «errando» en su afán por mantenerlo más como una afición que un modo de vida. Y es que debe haber variedad en el mundo, un mundo que muchos de nosotros nos comemos poco a poco.